Silvia es una mujer joven, casada y sin hijos; trabaja como secretaria de su esposo en un estudio contable. Ella está satisfecha con la vida ordenada y tranquila que lleva; siente que nada le falta. Cierto día, a través de una red social, se entera de que una antigua amiga está intentando contactar a los excompañeros de la secundaria. De inmediato comienzan a organizar encuentros con el objetivo de llegar al gran evento anual, con motivo del vigésimo aniversario del egreso. Lentamente, vuelven a la vida de Silvia aquellos seres que fueron importantes durante su niñez y adolescencia, y con ellos, las experiencias que habían quedado adormecidas. Al revivirlas, pasado y futuro empiezan a mezclarse en un enfrentamiento que lleva a la protagonista a un estado de crisis. Así, descubre que su vida no es tan estupenda como pensaba y decide reaccionar. A partir de allí, se verá en la necesidad de tomar decisiones que nunca había imaginado y que la cambiarán para siempre. La autora despliega en esta novela una estructura de historias que recuerda a las muñecas rusas, una dentro de otra, en un juego narrativo que aumenta la tensión capítulo a capítulo y que mantendrá al lector en vilo hasta el final.